Jeremy Bentham, destacado filósofo británico de la Ilustración, marcó un hito no solo en la filosofía política sino también en la criminología, un campo que en su tiempo aún carecía de definición formal. Este texto explora la vida de Bentham, su pensamiento revolucionario y su influencia duradera en la criminología, enfatizando cómo sus ideas continúan resonando en las prácticas actuales.
Biografía de Jeremy Bentham
Nacido en Londres en una familia acomodada, Bentham se sumergió desde joven en un ambiente académico riguroso. Estudió en la escuela de Westminster y, a la temprana edad de 12 años, ingresó al Queen’s College en Oxford, donde se graduó sin la presión de exámenes escritos, sino a través de evaluaciones orales. Esta formación temprana preparó el escenario para sus futuras exploraciones intelectuales y reformas.
Aunque se formó como abogado y fue llamado al Colegio de Abogados de Inglaterra y Gales, Bentham optó por no practicar la ley, sino por sumergirse en la política y la reforma social. Criticó vehementemente el sistema político y legal de su tiempo, marcado por desigualdades y una fuerte resistencia a la redistribución de poder y riqueza.
Influencia en la Criminología
Crítica al Sistema de Castigos
Bentham se horrorizó ante los crueles castigos públicos de su época, tales como la horca y los azotes, que eran espectáculos públicos. Estos castigos, a menudo justificados por la Biblia, no disuadían el crimen de manera efectiva y eran moralmente cuestionables.
Filosofía de la Utilidad
Bentham introdujo el principio de «la mayor felicidad para el mayor número» como base de la moralidad y la ley. Este enfoque utilitarista buscaba reformar el sistema de justicia penal hacia uno que realmente redujera el sufrimiento al disminuir la delincuencia, en lugar de simplemente infligir dolor.
El Cálculo de la Felicidad
Propuso un método para evaluar las acciones basadas en su tendencia a aumentar la felicidad o disminuir el sufrimiento, analizando factores como la proximidad, la certeza y la pureza de los actos. Este enfoque racional buscaba fundamentar las leyes y los castigos en una base más científica y ética.
Reformas en el Castigo y la Prevención del Crimen
Reconociendo que muchos delincuentes eran impulsados por la desesperación económica, Bentham abogó por condiciones más humanas y efectivas para prevenir el crimen, como mejores oportunidades económicas y reformas en las condiciones de vida, en lugar de simples castigos severos.
Reformas Propuestas por Bentham
Jeremy Bentham propuso numerosas reformas que buscaban transformar no solo la ley penal sino también las estructuras sociales y políticas de su tiempo. Su enfoque se basaba en la lógica y la racionalidad, apuntando siempre hacia el mejoramiento del bienestar general. A continuación, se exploran algunas de las reformas más significativas propuestas por Bentham:
Reforma de la Legislación Penal
Bentham criticó duramente el sistema penal de su época, que estaba repleto de castigos desproporcionados y arbitrarios. Propuso un sistema de castigos calibrados más racionalmente, donde la severidad del castigo debía ser proporcional a la gravedad del daño causado por el delito. Este enfoque buscaba ser preventivo más que punitivo, intentando disuadir el crimen de manera eficaz sin recurrir a la crueldad.
Panóptico: Supervisión y Reforma Penitenciaria
Uno de los conceptos más innovadores de Bentham fue el diseño del Panóptico, una estructura arquitectónica para prisiones que permitía la vigilancia constante de los reclusos con un mínimo esfuerzo por parte de los guardias. El objetivo era crear un sentido de «visibilidad constante» que sirviera como un fuerte disuasivo contra el mal comportamiento, promoviendo la auto-regulación entre los prisioneros. Aunque el Panóptico en sí mismo nunca se construyó durante la vida de Bentham, el concepto influyó en el diseño de prisiones y sistemas de vigilancia modernos.
Igualdad y Derechos Civiles
Bentham también abogó por la extensión de los derechos civiles a más ciudadanos, incluidas las mujeres y las minorías, que en ese tiempo estaban largamente excluidas de las esferas políticas y sociales. Promovió la idea de que las leyes debían aplicarse equitativamente a todos los ciudadanos, independientemente de su estatus social o económico. Sus propuestas incluían reformas para hacer el sistema de votación más inclusivo y representativo de la población general.
Educación y Prevención del Crimen
Bentham creía firmemente en el poder de la educación como medio para prevenir el crimen. Propuso que el estado debería invertir en educación para todos los estratos sociales, argumentando que un público mejor informado y educado sería menos propenso a cometer delitos. Veía la educación no solo como una herramienta para el desarrollo personal, sino también como una estrategia crucial para el mejoramiento de la sociedad en su conjunto.
Estas reformas, profundamente adelantadas a su tiempo, reflejan la visión utilitaria de Bentham de una sociedad en la que las leyes y las políticas están diseñadas para promover el mayor bienestar posible. Sus ideas sobre la reforma legal y social siguen siendo relevantes en debates contemporáneos sobre justicia penal, derechos humanos y políticas públicas.
Críticas y Legado
Bentham fue crítico con lo que consideraba delitos triviales y abogó por una reevaluación de lo que constituía un crimen. Además, fue un pionero en la defensa de la igualdad de género, desafiando las normas de su tiempo que veían a las mujeres como inferiores y menos capaces.
Las ideas de Bentham sobre la justicia penal y la igualdad han influido en numerosas reformas legales y criminológicas a lo largo de los siglos. Sus principios utilitaristas siguen siendo un pilar en el estudio de la ética y la ley, promoviendo un enfoque más humanitario y racional hacia la resolución de problemas sociales.
Conclusión
Jeremy Bentham fue mucho más que un teórico; fue un reformador cuyas ideas adelantaron su tiempo y cuyos principios continúan influyendo en la criminología moderna. Al replantear la moralidad, el castigo y la justicia social desde una perspectiva utilitaria, Bentham no solo cuestionó las normas de su época, sino que también sentó las bases para un enfoque más ético y efectivo de la ley y el orden.